El debate sobre la reelección de Susana Villarán, lamentablemente, está cayendo, de uno y otro lado, en posiciones moralizantes y poco políticas. Que la transparencia, que las manos al fuego, que si cumplió su palabra de mujer o no. La verdad, como vecino, eso me chupa un huevo. En serio.
¿Qué me preocupa? Cosas tipo, ¿el próximo alcalde, incluyendo a SV, qué actitud va a tener con respecto a la discriminación por orientación sexual? ¿Promoverá ordenanzas? ¿Qué ondas con la disminución de espacios públicos en la ciudad? ¿Tienen idea de qué hacer? ¿Saben o manejan números sobre áreas verdes versus habitantes? ¿Qué hacer con el acoso sexual callejero? ¿Y qué ondas con las políticas culturales en espacios públicos? ¿Continuamos o no con la puesta en valor social de las huacas y su integración como lugares de encuentro? ¿Cómo hacemos para peatonalizar no solo el centro de lima, sino la ciudad entera?
Estas son preguntas, totalmente personales y seguramente marcadas por algún sesgo, pero que podríamos hacerlas a cualquiera de los candidatos, incluyendo a la alcaldesa que busca reelegirse.
Fuente de la Foto: Facebook de Lima Más Arriba
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