(Esta es una idea muy en borrador, y seguramente tendrá varios errores de fechas y datos, pero en la medida que son ideas que voy teniendo y que me gustaría compartir, las escribo y las comparto en la web).
Una forma ver la historia del proyecto OLPC es desde los usuarios. Quizá tratar de entenderlo desde los usos, los procesos de apropiación. Entender sus fallas, no desde el punto de vista tecnológico, sino como fallas sociales. ¿El proyecto OLPC falló en el Perú por un problema de capacitación de los profesores? ¿Porque quizá el proyecto no contaba con los elementos propios de un proyecto, con metas, con fines, con indicadores bien planteados? Unas preguntas de este tipo llevan a una respuesta tautológica, si el problema es social, la respuesta es social. Quizá, con otra capacitación, con otras metas, todo pudo haber cambiado.
Esta es más o menos la tesis desde la comunicación para el desarrollo, que parte del punto de vista que: 1) Toda herramienta es básicamente neutra (la teoría del guante vacío, esperando ser llenado por una mano imaginada previamente) y 2) Que lo importante no es la herramienta sino el fin con el que va a ser usada. Así, no importa con qué martilles, sino que tengas un objeto para martillar.
El proyecto OLPC en el Perú, posiblemente pudo haber sido mejor. Es una pregunta sin respuesta, en realidad. No lo sabemos. Quizá no conozcamos nunca por qué falló, qué falló, qué era mejorable. Lo que sí puede ser interesante es ver, además de la mirada sobre «lo social» del proyecto, es entender cómo este proyecto se engarza con la historia misma de la computación, como el entender el proyecto OLPC nos permite también entender algunos aspectos de la propia historia de la tecnología. Y como lo social y lo tecnológico se hibridizan mutuamente.
Lanzo algunas ideas, con poquísimas pretensiones académicas (tampoco diré que son nulas). En primer lugar, hay un hito en el desarrollo y creación de las computadoras personales. Cuando Jobs y Wozniak pensaron en crear su prototipo de Apple I, su primer modelo de computadora personal, ¿estaban mirando hacia el futuro, con que cada niño cuente con su computadora personal? Sí creían que en cada casa debía haber una, ¿pero cuál era el tipo de pedagogía que estaban pensando?
Hay un efecto en el desarrollo de la computadora personal, lanzo otra hipótesis, y la mirada de Pappert en el uso de computadoras y el desarrollo de competencias. ¿Hubiera sido posible el desarrollo de la propuesta del Logo, sin que previamente existan estas computadoras personales? Insistamos aquí en que el desarrollo de la tecnología informática tuvo un efecto fuerte en ciertas miradas (y también mercados) sobre la educación. Durante los años 80 comenzó a verse la idea de que en las escuelas se enseñara algo con esos novedosos equipos. Las casas comenzaban a comprar sus computadoras de 64KB (Atari, Commodore) y claro, la publicidad mostraba a los niños y niñas creando programas. No olvidemos la película War Games, donde era un adolescente el que manipulaba los datos de calificaciones de su escuela. En el Perú, según recogí, hubo una idea en alguna oficina del Ministerio de Educación para llevar el Logo a todo el mundo. (Claro, era el primer gobierno de García y no había plata alguna).
Saltemos a los años 2000 y el proyecto OLPC. Este recoge varias de las ideas de Pappert (OLPC surge en el mismo lugar, el MIT). Pero las amplía. Propone nuevas cosas. Negroponte le consulta a Jobs sobre cómo mejorar su dispositivo digital (la XO-1), que inicialmente no tenía pantalla, sino un elemento proyector. Las historias se entrecruzan, no se desligan. Y es ese proyecto el que llega al Perú, a través de una inmensa compra, una de las mayores.
No estoy señalando aquí que la historia social de las OLPC sea menos importante, pero no podemos perder de vista tampoco esta historia misma de la tecnología, y de los efectos que ha tenido sobre «lo social».
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